¿Sabías que el tiempo es el único recurso que no se puede recuperar en una campaña?

1. Cada día perdido es una oportunidad menos

En una campaña política no existe el lujo del tiempo extra. Todo lo que no se hizo hoy, no se podrá hacer mañana. El calendario electoral es fijo y avanza sin pausa. Por eso, una campaña profesional debe operar como una maquinaria bien ajustada desde el primer día. En Santa Mora & Asociados, después de décadas trabajando en distintos países, desarrollamos el Método Voto a Voto, una herramienta que permite monitorear diariamente el avance de la campaña, identificar retrasos, ajustar acciones y evitar que se acumulen pendientes. Cada semana sin planificación es una semana de oportunidad perdida. Por eso decimos: la gestión del tiempo no es un tema operativo, es una decisión estratégica.

2. Gerenciar el tiempo es más importante que administrar recursos

Muchos equipos están muy enfocados en contratar personal o producir manuales. Pero si no se aprovecha bien el tiempo disponible, el resto pierde sentido. ¿Cuánto tiempo se pierde en reuniones innecesarias? ¿Cuánto se tarda en tomar decisiones por falta de coordinación? ¿Cuántos días se va el candidato a zonas donde no hay votos clave? En campañas ganadoras, cada hora del equipo y del candidato tiene una razón de ser. El tiempo debe usarse con un solo propósito: ganar votos. En una campaña con el enfoque correcto inserto en su gestión, frente a una disyuntiva sobre qué mejor decisión tomar solo hay una respuesta posible: la que nos permita ganar votos.

3. Las campañas efectivas trabajan como si el tiempo fuera dinero

¿Inviertes 3 horas en una reunión con 15 personas? Entonces esa actividad debe sumarte suficientes votos para que se justifique. El tiempo invertido en cualquier actividad debe tener un retorno en votos. Esta mentalidad ayuda a priorizar: no todo es urgente, no todo vale la pena. Las campañas que trabajan con esta lógica toman mejores decisiones en el día a día, y llegan más preparadas al momento decisivo.

4. El tiempo no se recupera

Una campaña desordenada se ve así. Con el argumento de qué es necesario llegar a la mayor cantidad de lugares, el responsable de territorio desplaza a las brigadas a cuatro lugares en un mismo día, utilizando más tiempo en movilizarse de un punto a otro que en contactar votantes. Con la idea de que el candidato construya una red de alianzas con los líderes de las organizaciones sociales de la localidad, la responsable de agenda lo llena de reuniones interminables con estos grupos. Y en esta dinámica se pasan todo el día en muchas actividades llenas de buenas intenciones y sin ganar votos. Existe un viejo adagio que dice que de buenas voluntades está pavimentado el camino al infierno. Nunca más preciso. La derrota es el único destino para un equipo que no enfoca sus actividades en ganar votos.

5. ¿Estás usando bien el tiempo en tu campaña?

1.¿Tu equipo tiene metas semanales claras con responsables asignados? ⬜ SÍ / ⬜ NO

2.¿Revisas el avance por semana y corriges el rumbo si es necesario? ⬜ SÍ / ⬜ NO
3.¿El tiempo del candidato se organiza en función de la estrategia? ⬜ SÍ / ⬜ NO

4.¿Tu campaña tiene mecanismos para responder rápido a imprevistos? ⬜ SÍ / ⬜ NO
5.¿Tu equipo entiende que el tiempo es el recurso más valioso en campaña? ⬜ SÍ / ⬜ NO

La desorganización cuesta tiempo. La falta de enfoque, la dispersión territorial y las reuniones sin retorno electoral desgastan al equipo y debilitan la campaña. Si quieres aprender a usar el tiempo como herramienta estratégica trabajemos juntos con base en nuestro Método Voto a Voto. Escríbenos a hola@santamora.com.mx y te acompañamos a mejorar la organización de tu equipo.